C.V FREDY CLAVIJO Ver Portafolio
Pereira, Colombia. 1977

Artista egresado de la Universidad Tecnológica de Pereira. Hizo parte de la residencia artística La Cuenca en esta misma ciudad. Su producción lo ha llevado a indagar, a través de diversos medios, por la relaciones que establecen los ser humano con el territorio, así como por las actividades de ocio que son comunes en la sociedad contemporánea. Sus proyectos han sido seleccionados en diversos eventos a nivel nacional como internacional como arte cámara 2017, el 44 Salón Nacional de Artistas 2016, Facade Video Festival 2017 (Bulgaria), Nos Desirs Font Désordre 2017 (Marsella, Francia), entre otros. Ha realizado residencias artísticas en Taller 7 en la ciudad de Medellín durante el año 2017, La Usurpadora en Puerto Colombia 2015, Casa Tres Patios en 2012; y La Multinacional en Ecuador en 2016.

DESCRIPCIÓN DEL ARTISTA
Mi práctica artística parte de mi interés por reflexionar sobre el paisaje como un escenario geopolítico, en especial de las zonas aisladas de los centros donde se desarrollan diversas disputas por la tenencia y la explotación de los recursos que subyacen en estos territorios. Parte de estas búsquedas se centran en las relaciones que se crean entre lo rural y lo urbano, ya sea por los diferentes grados de interdependencia o de vecindad entre el mundo agrario y la vida en la ciudad. Así mismo me inquietan las relaciones que establece el ser humano con el entorno natural y como le asigna a este cualidades estéticas, simbólicas, arquetípicas, míticas y poéticas contribuyendo a determinar los rasgos culturales de las comunidades y sus asentamientos. Como parte del proceso de materialización, hago uso de objetos de producción industrial que contrasto con el material orgánico, ambos extraídos la cultura material del contexto donde desarrollo cada propuesta. Algunos de esos materiales, son objetos residuales que encuentro abandonados y que se incorporan al paisaje luego de cumplir su ciclo habitual de uso. Me interesan estos vestigios, porque en ellos aparece una marca, una escritura en la materia, los cual hace que estos materiales de desecho, porten consigo, nuevos sentidos. Estas ruinas, averiadas, fragmentadas, son rastros que hablan de nuestro paso por el mundo, de nuestra manera de relacionarnos con los objetos, de nuestra relación con el entorno natural, de la fragilidad de los entornos, así como del cambio y la transformación como una constante en la vida. Es a partir de estas preguntas que surgen una serie de ensamblajes, videos, fotografías y dibujos que componen las instalaciones, como una suerte de paisaje ampliado que deja entrever un ecosistema visual donde se establecen nuevas relaciones de sentido entre cada uno de los componentes.